Uzbekistán, una desconocida que va camino al Mundial 2014
Cuando uno escucha nombres de países como Uzbekistán, es difícil diferenciarlo de algunos de sus vecinos ex-soviéticos, como Kazajistán, Kirguistán, Tayijistán o Turkmenistán. Sin embargo, este país de más de 25 millones de habitantes quiere darse a conocer en base al fútbol, deporte en el que tiene una realidad más que interesante en todas sus categorías.
Tras la victoria de este martes ante Líbano, los «lobos blancos» dieron un paso más que importante para llegar a Brasil 2014, el que podría ser el primer Mundial de su historia. Uzbekistán lidera el grupo A de las Eliminatorias asiáticas, con 11 puntos en 6 partidos jugados. Lo siguen República de Corea (que tiene un partido menos) con 10, Irán (también con 5 partidos) y Qatar con 7, y su último rival con 4. En la próxima fecha, la antepenúltima, el líder tendrá fecha libre, pero si gana alguno de los dos partidos que le restan (Corea de visita y Qatar en casa) prácticamente sellará el boleto a Brasil 2014. ¿Pero qué sabemos de esta selección a priori desconocida?
Suele decirse que Uzbekistán es la más fuerte de las repúblicas asiáticas provenientes de la URSS, pero también la que siempre queda a las puertas de los objetivos. Esta república, independizada en diciembre de 1991, tuvo su primer momento de gloria en 1994, cuando logró la medalla de oro en los Juegos Asiáticos, tras vencer a China en la final. Desde ese momento también ha logrado participar en todas las Copas Asiáticas que se han disputado (5 en total), y su máximo logro fue llegar a semifinales en la última edición, en la que los uzbekos amenazaron seriamente en llegar lejos pero fueron goleados por Australia por 6-0.
A pesar de los buenos resultados a nivel continental, nunca ha podido llegar a la clasificación a un Mundial. Lo más cercano que logró fue en la clasificatoria para Sudáfrica 2010, cuando luego de lograr el tercer puesto en su serie, quedó eliminado frente a Bahrein, en una serie que se recuerda porque la FIFA anuló el resultado del juego de ida (en el que había vencido Uzbekistán 1-0) por un error arbitral. Bahrein luego disputaría (y perdería) la repesca ante Nueva Zelanda. Esta competición puede significar una recompensa histórica para una selección que vive un gran presente y que, por si fuera poco, también ha cosechado muy buenos resultados en las selecciones juveniles.
Aún se recuerda en su tierra el seleccionado que participó del Mundial sub 20 del 2003, en el que compartieron grupo con la España de Andrés Iniesta y la Argentina de Carlos Tévez. Pero sin dudas en los últimos años se han dado las mayores alegrías para los uzbekos, que lograron clasificar al Mundial sub 17 de 2011 y a los Mundiales sub 20 y sub 17 que se disputarán este año. Por si fuera poco, a este último llegan como campeones asiáticos sub 16.
En resumen, Uzbekistán tiene con qué soñar. Por supuesto que no con ganar un Mundial (de hecho bwin da 5001 veces lo apostado si el milagro se concretara), pero no sería extraño que escucháramos más ese nombre raro en los próximos años.