Argentina y la maldición del Papa campeón del mundo (III)
Tercera y última parte de este repaso por la llamada «maldición del Papa campeón del mundo», que reza que desde 1938 el país con el Papa no se alza con la Copa del Mundo. Para este artículo repasaremos lo acontecido entre 1990 y 2010.
Italia 1990: La década del 90 tuvo dos constantes: Juan Pablo II como Papa y su selección (Polonia) con magros resultados. En las Eliminatorias para este Mundial, Polonia formaba el grupo 2 junto a Inglaterra, Suecia y Albania. La victoria inicial ante los albaneses llenaba de esperanzas al seleccionado, que luego autodestruyó sus aspiraciones al cosechar un punto en cuatro partidos ante Suecia e Inglaterra.
Estados Unidos 1994: Las Eliminatorias Europeas para este Mundial tuvieron una cantidad mayor de participantes por cada grupo. A Polonia le tocó enfrentarse a Turquía, Holanda, Inglaterra, San Marino y Noruega, un grupo a priori muy difícil. Polonia comenzó su grupo con grandes resultados (victorias ante Polonia y San Marino, empate en Holanda, igualdad ante Inglaterra como local), pero luego de 5 partidos invicto, inexplicablemente comenzó a perder. En total fueron 5 derrotas consecutivas (dos ante Noruega y una ante Inglaterra, Turquía y Holanda) que sepultaron toda chance de que Juan Pablo II viera a su selección de nuevo en un Mundial.
Francia 1998: Nuevamente el sorteo fue cruel para con Polonia. Enfrentarse con dos potencias europeas como Inglaterra e Italia era prácticamente una invitación a la eliminación. Apenas un empate ante los italianos como local fue el mejor resultado, ya que luego sólo podría vencer una vez a Georgia y dos veces a Moldavia, para quedarse a ocho puntos de la repesca. Fue el último Mundial del siglo, y si bien Polonia no era una potencia, la maldición seguía en pie.
Corea/Japón 2002: Este sería el último Mundial que presenciaría Juan Pablo II. Y como si fuera un homenaje, su selección estuvo presente tras muchos años. Polonia se aprovechó del primer sorteo favorable en años, ya que su grupo de Eliminatorias era realmente sencillo: Ucrania, Bielorrusia, Noruega, Gales y Armenia. De los 10 partidos, los polacos sólo cayeron una vez ante Bielorrusia, una vez que se había consumado la clasificación. El primer lugar en la serie fue un hecho, y entregó el boleto directo hacia el primer Mundial realizado en Asia. Allí Polonia compartió grupo con Corea del Sur, Portugal y Estados Unidos, una serie bastante difícil y pareja. Los albirrojos se despidieron rápidamente, con derrotas ante Corea del Sur (2-0) y Portugal (4-0). La despedida, decorosa, fue con victoria 3-1 ante Estados Unidos, un resultado que no pudo cambiar el último lugar en el grupo.
Alemania 2006: Luego del largo Papado de Juan Pablo II, llegó la hora de sucederlo. El encargado fue Joseph Ratzinger, que asumió bajó el nombre de Benedicto XVI. Luego de mucho tiempo con una «selección papal» débil, quien asumía el mando de la historia era nada menos que Alemania, una selección que históricamente siempre llegaba a las definiciones. Por si fuera poco, la Copa del Mundo se disputaría precisamente en el país teutón, por lo que todo estaba dado para que el local llegue a romper el maleficio. La primera rueda fue sencillamente perfecta: 9 puntos en 3 partidos, 8 goles a favor y 2 en contra. La buena racha prosiguió con la victoria 2-0 ante Suecia en octavos, y luego llegaría el partido frente a Argentina, que terminó definiéndose por penales y a favor de los bávaros. Llegaban las semifinales, y todos pensaban que el local seguía de largo. Sin embargo, como si fuera una de esas locas vueltas del destino, quien eliminaría a la selección del Papa (como pasó con Polonia en 1982) fue nada menos que Italia. La maldición volvía a decir presente.
Sudáfrica 2010: Tras el trago amargo, Alemania volvió a intentarlo. Los teutones clasificaron invictos, con 6 victorias y dos empates (curiosamente ambos ante Finlandia y no ante Rusia, que salió segunda) en ocho presentaciones. En la justa mundialista compartieron grupo con Ghana, Australia y Serbia, en uno de los grupos más difíciles de la Copa del Mundo. Goleada 4-0 frente a Australia, caída ante Serbia por la mínima diferencia y victoria, también por la mínima, ante Ghana, resultados suficientes para alcanzar octavos de final con el primer lugar del grupo. El camino de ahí en más fue durísimo: primero Inglaterra (a quien venció con autoridad -y algo de polémica por el famoso gol fantasma de Lampard- por 4 a 1), Argentina (clarísimo 4-0) y luego España, que ya había derrotado a los germanos en la final de la Euro 2008. En un partido deslucido, la «furia» venció 1-0 y dejó sin posibilidad alguna a los alemanes.
Brasil 2014: Benedicto XVI renunció a su cargo, y en Alemania alguno suspiró. Jorge Mario Bergoglio asumió hace pocos días, y se convirtió en el primer Papa argentino (y latinoamericano) de la historia. Francisco, como se ha hecho llamar, es un amante del fútbol y espera no volcar la maldición hacia su selección. Los argentinos esperan que su «Messías» logre ser justamente quien logre romper con la maldición del Papa campeón del Mundo.
En resumen, la historia indica que luego de la Segunda Guerra Mundial, ninguna selección del país del Papa ha podido ganar una Copa del Mundo. Y además, cuando el Papa no era italiano, fue precisamente la «azurra» quién eliminó a la selección del Papa en el primer Mundial luego de su designación. Con este pronóstico, Argentina debería ser eliminado en semifinales ante Italia, aunque claro está, esto no es nada más que un juego con las estadísticas. ¿Podrá Argentina romper este mal pronóstico? Bwin aparentemente cree en la posiblidad, ya que la cuota de Argentina es de 5.75, la segunda menor luego de Brasil, que tiene 4.50. El tiempo dirá si podremos seguir diciendo que religión y fútbol no han sido compatibles.